
El derecho colaborativo es un enfoque innovador y
constructivo para la resolución de conflictos legales que se
centra en la cooperación y el diálogo entre las partes
involucradas. A diferencia de los métodos tradicionales, que a
menudo pueden ser adversariales y generar tensiones, el
derecho colaborativo promueve un ambiente de colaboración
donde todas las partes trabajan juntas para encontrar
soluciones que satisfagan sus necesidades y objetivos.
Cada parte está representada por un abogado y ambos
compañeros sumamos nuestros esfuerzos y conocimientos
para buscar un acuerdo común que lleve incluido los
intereses y necesidades de cada cliente.
¿Por qué elegir el Derecho Colaborativo?
- De la confrontación a hacer equipo. Los letrados junto con
las partes en conflicto firmamos un acuerdo donde nos
comprometemos a utilizar diversas técnicas de resolución de
controversias y a evitar llegar a un contencioso al juzgado.
Este cambio de enfoque permite resolver el conflicto de
manera pacífica y efectiva. Esto permite a las partes
mantener una relación más positiva, lo cual es especialmente
importante en casos familiares o comerciales. Lugar amable
donde comunicarse y entenderse preservando así la relación
de afectividad. - Control sobre el proceso: Autocompositivo.
Autorresponsabilidad.
Las partes son las que buscan y proponen las soluciones
que sean mutuamente beneficiosas. Son ellas las que firman
el acuerdo según sus intereses y necesidades, se
comprometen de forma voluntaria a cumplirlo. Esto les otorga
un sentido de autorresponsabilidad y cumplimiento de forma
voluntaria. Decido y opino sobre mi conflicto. - Confidencialidad: A diferencia de los procedimientos
judiciales, que son públicos, el derecho colaborativo se lleva
a cabo en un entorno privado. Esto permite a las partes
discutir sus preocupaciones y necesidades sin temor a que la
información se haga pública. Un espacio de confianza donde
puedo hablar de mis sentimientos y necesidades.
- Ahorro de tiempo, costos y no tener que pasar por la
frustración de falsas expectativas si ganas o pierdes un juicio.
Al evitar el litigio, el derecho colaborativo es más rápido y
menos costoso. Las partes pueden llegar a un acuerdo sin
las demoras, gastos asociados con un juicio, así como la
posible condena en costas. Cierras un problema en tu vida
en breve espacio de tiempo, costes reducidos y conocidos. - Apoyo profesional: En el proceso colaborativo, cada parte
cuenta con el apoyo de su propio abogado formado en
técnicas de mediación, negociación y resolución de
controversias. Además puedes contar con otros profesionales,
como mediadores o expertos, que facilitan la comunicación y
ayudan a encontrar soluciones creativas. Los letrados
sumamos nuestros conocimientos y esfuerzos en buscar un
acuerdo común que satisfaga a ambas partes.
Conclusión
El derecho colaborativo es una alternativa valiosa para
aquellos que buscan resolver conflictos de manera efectiva y
armoniosa fuera del Juzgado. Si estás considerando esta
opción, estaré encantado de guiarte a través del proceso y
ayudarte a alcanzar un acuerdo que funcione para ti. ¡No
dudes en contactarme para más información!
Fdo. Mª José Zaragoza.